ÑAMM!
Hace calor. Me despierto con una pata en cada extremo de la cama, cual compás. Miro el turbo, él me mira como burlandose la melena maradónica que luzco a la mañana temprano.
Me tropiezo con una ojota que dejé tirada cerca de la cama, y tambaleando llego al living, no sin antes clavarme la punta del mueblecito donde está la tele. Casi rebotando, y con sagacidad me hago presente en la cocina, donde apenas abro la puerta de la alacena se me cae un paquete de yerba taragüi en la cabeza, dejando el piso como una de esas maquetas que hacen los pibes de 6to grado. Inmutable, no digo nada. Comienzo a recoger todo el quilombo que se me armo, mientras pienso por que carajo deje la yerba guardada a presión en el mueblecito, en eso levanto la vista y veo el reloj...repaso a toda velocidad el catalogo de excusas para no ir a laburar, ahhh...ya usé todas, toditas, pero siempre hay espacio para una nueva excusa: "Buen día,Sr. Ache, lamentablemente no voy a poder ir hoy...ehh....pseee tuve un accidente...msee...digame, usted sabe si la ART cubre "golpes propincuados con objetos contundentes fuera del ámbito laboral, dentro del horario de trabajo?" a...no...bue...pe...se... !
Y otra vez andeme yo en el subte con un poco de yerba en la cabeza.
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