Siesta... Si, está?

Una siesta ajena rige mi vida. No puedo siquiera dimensionar el embole que significa la palabra siesta. No la tolero, no la soporto. Me ofusca, me asfixia, siento que es tiempo desperdiciado. Cómo una manera de no honrar la vida, de malgastarla y hacer que malgaste la mia.

La siesta es una manera evasiva de contacto con el mundo externo. Cabe hacer la distinción aquí, que me refiero a la "siesta de vicio".

Sin lugar a dudas existen distintos tipos de siestas, que las hace un poco menos odiables, y tal vez, comprensibles, por ejemplo, la que se genera por eventos particulares de la vida, llamemosle "las siestas reparadoras" (te levantaste a las 4.30 am para ir a buscar la partida de bautismo a esa parroquia perdida en el medio de Grandbourg. Ok. entiendo.), o las "siestas preventivas" antes de casamientos, recitales, fiestas de alto voltaje etc etc etc.

Ahora bien... existe una manera más estúpida y vacia de perder "vida"??
Acostarse a dormir una siesta y despertarse anacrónicamente, sin saber si merendar o cenar o desayunar o volver a dormir... no es una manéra más que patética de arruinarse un fin de semana?

Definitivamente, necesito un nuevo hobbie.

Me niego a morir de una embolia mental, producto de la furia que me genera la siesta ajena.

Tal vez me dedique a entrenar castores de la reserva ecológica para que hagan una coreografia, u organizo una reunión de Tupperware en casa, o quizas me compro un libro usado en el Parque Centenario de "tarjeteria española" pero lo que si sé, es que otra siesta no me banco.

Palabra de una Ex-Chica Cosmo.